martes, 30 de marzo de 2010

Noche de vino tinto ( José María Nunes - 1966)


A finales de los años cincuenta, un grupo de jóvenes burgueses de Barcelona apasionados por el cine, y fascinados por la Nouvelle Vague francesa, inician un movimiento cinematográfico sin precedentes en España, conocido como la Escuela de Barcelona. Pretendían renovar completamente el lenguaje cinematográfico, oponiéndose a lo que ellos mismos llamaban el cine mesetario, en referencia al que se hacía en el resto de España - en realidad, en Madrid-.

A este grupo se unió un joven portugués, José María Nunes, que rodó la que se considera primera película de la Escuela, Mañana, en 1957. Nunes no pertenecía a la burguesía de su país, al contrario, era hijo de una familia humilde, lo que le llevó a tener enfrentamientos con algunos miembros de la Escuela. Nunes no abjuró nunca de sus planteamientos y, fruto de ellos, realizó tres de las películas más significativas del movimiento: la ya citada Mañana, Noche de vino tinto y Biotaxia.

Noche de vino tinto le proporcionó un cierto reconocimiento internacional y la admiración de varios integrantes de la Nouvelle Vague, como Rohmer o Resnais. La película recoge una noche por las calles de lo que fue el Barrio Chino de Barcelona, ahora Raval, en la que dos jóvenes - Serena Vergano y Enrique Irazoqui- se enfrascan en diálogos un tanto deslavazados sobre casi todo lo divino y humano. De la extraña película, hay que destacar la coherencia narrativa del guión, poco habitual en las películas de la Escuela, y el trabajo de los protagonistas: la bellísima Serena Vergano, compañera del arquitecto Ricardo Bofill, y su primo Enrique Irazoqui, que sería Cristo en la película El evangelio según San Mateo, de Pasolini.

José María Nunes, un hombre libre y coherente, falleció el pasado día 24 de marzo en el hospital de la Vall d'Hebrón, en Barcelona. Descanse en paz.