domingo, 14 de febrero de 2010

Un deseo breve e inalcanzable

A media mañana todo se detiene: los aperitivos de domingo, los niños, el periódico y el postre. La vida real puede con la virtual y a mí me gustaría vivir en una casa con vistas a La Alhambra o al Palacio Real de Madrid...o a la bahía de la Concha.